Nos encanta que nuestros perros nos presten atención, nos escuchen, nos entiendan y además, que nos hagan caso. Puede incluso que al conjunto de todo esto le llamemos respeto.
Queremos saber si nuestros perros nos quieren, por qué nuestros perros hacen esto o aquello o por qué le gusta una cosa u otra. Queremos saber, queremos que nuestro perro sepa, pero… amiga…
Cuando callamos, ay… cuando callamos aparecen los milagros. Cuando callamos empezamos a aprender de verdad. Para saber, para escuchar, antes debemos aprender a callar, y desde el silencio nuestro perro nos responderá todas las dudas que surjan con respecto a nuestra relación.
A partir de aquí, que acabas de empezar a conocer de verdad de la buena a tu amado perro, a partir de aquí puedes comenzar a llamarlo respeto, que empieza en ti, que deseas conocer en profundidad a tu perro y a respetar quién es de verdad.
Recuerda que no existe respeto si no es mutuo, que para ser de fiar, hay que confiar, que para ser respetado hay que respetar, y la escucha y el lenguaje amable son la base sólida de toda relación
Yo no me imagino haber enamorado al amor de mi vida solamente hablando, hablando y hablando. Sé que el amor de mi vida, mi perro, me ama porque le escucho, le respeto y confío en él. Y todo esto empezó cuando di el primer paso, le permití ser él mismo y me callé, me callé para empezar a conocer quién es.
Gracias, gracias, gracias.
Elena Dogsanimal