Con la llegada de otoño puedes percibir ciertos cambios en las actividades de tu perro en comparación con el caluroso verano. Esta estación llega con mucha humedad, lluvias, tormentas, frío y, como no, menos horas de sol.
Los perros jóvenes necesitarán más acción para calentar su metabolismo y para tener su mente activa y darle buen uso, necesitarán aprovechar las horas de sol para regenerarse.
Por otro lado, seguro que a tu perro le cuesta más despertarse tan temprano por las mañanas y si vives con un perro anciano todo esto se multiplica y cuesta mucho más, por eso es tan tan importante que nos adaptemos a su estado físico y emocional.
Si vives con un perro joven, tendrás que entender que puede que sus paseos y actividades del día cambien un poco. Que en las mañanas no apetezca ponerse a correr y jugar sino dar un buen paseo tranquilo para llegar a casa, entrar en calor y echarse una buena siesta al sol. Aprovecha las tardes para salir a jugar, encontrarse con más perros, correr, hacer el perro cómo te cuento en el artículo ‘Seamos más divertidos’… es muy importante también que su alimentación esté completa. Tu perro necesitará absorber proteína y grasas de calidad para proteger sus articulaciones de los cambios bruscos de temperatura.
Respecto a esto anterior, recuerda que el otro día hablamos de Los beneficios del otoño en la dieta Barf.
Aprovéchate de la naturaleza en esta época, está preciosa y además los olores y sonidos de la montaña cambian y son un verdadero placer para nuestros perros, infinitas posibilidades de nutrir su mente con información amable, natural y agradable en todos los sentidos.
En este caso, si tus perros son jóvenes aprovecha para hacer excursiones bonitas, si en cambio tus perros ya son mayores, como es mi caso, ve a la montaña con una mantita, échala al suelo y sentaros a tomar el sol y nutrir vuestros sentidos juntos.
Cuando nuestros perros ya son maduros o ancianos su cuerpecito cambia mucho más con este cambio de estación, tendremos en cuenta cómo se encuentra de ánimo y cómo se mueve su cuerpo. Cuida mucho la calidad de su alimentación. Tu perro anciano necesitará tomar grasas animales de calidad para regular su temperatura corporal. Ten muy en cuenta su estado físico para con las actividades habituales. Puede que antes le gustase ir al parque a jugar con perros y ahora esté más reacio a relacionarse con ellos porque se encuentra más rígido. Calienta su cuerpo antes de salir a la calle: jugad un poco, hazle un buen masaje y si crees que lo necesita, utiliza un abrigo de su comodidad, que no le impida hacer ningún movimiento.
Será mejor si en la mañana retrasas el paseo y hacéis alguna actividad mental en casa, para que el paseo sea explorar, olfatear, hacer sus necesidades y mover su cuerpo. Observa siempre su postura corporal y la manera en que mueve sus articulaciones, si detectas cualquier rigidez fuera de lo normal, acude a un veterinario para explorarlo.
Agiliza el paso en el paseo, ve a paso de trote, le resultará más fácil entrar en calor y moverse con facilidad. También, intenta evitar la exposición en el exterior, por ejemplo, tomarnos una café en una terraza mientras nuestro perro está tumbado en el suelo…
¡Ah! Súper importante en esta estación es que cuidemos la higiene de su pelaje. Necesitarán un buen cepillado que ayudará a oxigenar su piel y así su organismo completo, esto aporta más calor, más energía, más movilidad a su cuerpo. Así que compra el cepillo adecuado para tu perro o acude a tu peluquería de confianza a que le ayuden a eliminar todo el pelo viejo que necesita regenerar y tener fuerza para lanar su pelaje. Puedes utilizar el cepillado como momento de masaje y relax para reactivar su circulación.
Ten cuenta que su piel es muy gruesa, en caso en que lo lleves a bañar, recuerda que aunque aparentemente esté bien seco, su piel puede acumular humedad y frío. Así que después de la sesión de pelu, haz lo que a ti te gustaría hacer si salieses ahora con el pelo húmedo a la calle. No permitas que se enfríe su piel, es su órgano más extenso y quién envía información a todo el organismo.
Además de todo esto, entiendo que entre semana sea más difícil adaptar cada una de sus actividades. Aun así, inténtalo y sobretodo aprovecha los fines de semana para organizarte y llevar a tu perro a la montaña, a caminar, a tomar el sol… aprovechad el tiempo y las horas de sol.
Deseo que encuentres herramientas y conocimientos para mejorar la vida de tu perro en esta estación. Me encantará leer en comentarios los cambios que vas a aplicar para con las necesidades de tu perro.
Gracias, gracias, gracias.
Elena Dogsanimal